LA DEPRESIÓN O LA LIBERTAD



Todos podemos pasar por momentos que consideramos desacertados, tener esa sensación que en lugar de seguir hacia adelante nos sentimos estancados, sin fuerza para revertir ninguno de los procesos y cambiar el rumbo. Nadie esta exento  de la depresión y cuando llega podemos decir que estamos sin ilusión y una fuerte sensación de soledad, sintiendo como si lleváramos sobre los hombros el peso del mundo. 

Realmente, lo que nos pesa es la vida, y es que perdemos de vista que la causa del problema no está fuera, no tiene la culpa el bouling en el trabajo, la ruptura sentimental, el despido laboral o esa enfermedad invalidante que nos han diagnosticado.  Somos nosotros que permitimos que nuestra falta de reconocimiento, de amor propio ceda ante la manipulación del Ego. 

Ahora bien, como "negociar" con la depresión?  debemos dejar de centrarnos en el porqué de las cosas, en el miedo al futuro o en la ansiedad por el pasado. Hacer verdaderos cambios internos que nos ayuden a vivir en el presente. Para poder lograrlo, hay que tomar conciencia de cuál es la situación que origina el conflicto, y después de identificar el origen, hay que poner manos a la obra y actuar, dando pequeños pasos en la dirección que necesitamos. Sin pausa pero sin prisa, dejando de funcionar con la mente y empezando a experimentar la realidad desde el corazón, escuchando la voz de nuestra Esencia y recobrando la confianza en Dios y en uno mismo. 

En ocasiones, la depresión puede ser una aliada, porque puede ser el estímulo que necesitamos para cambiar las cosas y comprender que los resultados de nuestras acciones corresponden al conocimiento que teníamos para ese momento, que hoy hemos adquirido una nueva enseñanza y por eso ahora soltamos nuestra "resistencia" (la no aceptación) a vivir lo que estamos viviendo, lo que produce ese sufrimiento, ignorando las expectativas del Ego, dejar de luchar y permitirnos ser guiados por la Energía Suprema que fluye desde el amor y la abundancia hasta llegar al punto exacto donde sentiremos la verdadera Libertad.

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