Yoshinori Noguchi, experto en coaching afirma que "la realidad de tu vida es un reflejo de lo que hay en tu interior" continúa señalando que "esto nos permite darnos cuenta y tener la oportunidad de cambiar y desarrollarnos hasta donde sea."
Conocer la Ley del Espejo nos ayuda a ser precavidos y a procurar no
alimentar el rencor y los malos sentimientos de ahora en adelante. No debemos
olvidar que proyectamos lo que llevamos dentro, por lo que cada cosa que veamos
en los otros, probablemente dirá más de nosotros mismos que de los demás.
El origen de nuestros
sentimientos negativos, incomodos, de frustración o molestia hacia alguna
determinada persona -tengamos el vínculo que sea- (padres, hijos,
parejas, maestros, guías, compañeros de trabajo, vecinos, cualquiera que
representa la autoridad, etc) hacia otros está en nosotros. Es posible que no
entiendas o no puedas ver dónde puedes tener eso que te muestra esa persona.
Pero ya sabes que nadie tiene el poder de hacerte enojar. Nadie tiene el poder
de alegrarte, de sanarte, todo el poder está dentro de ti y es tu decisión
entregarlo a otros.
Vivimos rodeados de personas para
tener la oportunidad de sanar a cada instante.
La ley del espejo nos muestra también
que en determinadas circunstancias reaccionamos de manera desproporcionada con
personas que nos reflejan cómo nos estamos comportando con otras personas. A
través del enfado o de reaccionar ante estos hechos nuestro inconsciente nos
protege, nos indica qué recordar y que no estamos actuando de la mejor manera
posible con otras personas.
PRIMERA LEY DEL ESPEJO:
TODO LO QUE ME MOLESTA, IRRITA,
ENOJA O QUIERO CAMBIAR DEL OTRO, ESTA DENTRO DE MI.
Ejemplo: Enfadarse o sentirse incomodo si alguien toma el liderazgo en una
situación, donde normalmente estás acostumbrado a hacerlo tú. Es posible que te
veas diciendo “es un mandón”, “siempre quiere hacerlo todo él” y en realidad no
es más que un reflejo de algo similar a lo que haces, pudiendo haber recibido
tú mismo ese tipo de críticas en el pasado.
SEGUNDA LEY DEL ESPEJO:
TODO LO QUE ME CRITICA, COMBATE O
JUZGA EL OTRO, SI ME MOLESTA O HIERE ESTA REPRIMIDO EN MI Y ME TOCA TRABAJARLO.
Ejemplo. Tener muy arraigada la
identidad de ser educado y amable, ante esta situación si decido ir a una
oficina para solucionar problemas burocráticos y la persona que me atiende
contesta de malas formas, me dice que le molesto, me ignora, etc. Me hará de
espejo de lo que yo no soy y no quiero ser provocando normalmente enfado.
TERCERA LEY DEL ESPEJO:
TODO LO QUE EL OTRO ME CRITICA, JUZGA
O QUIERE CAMBIAR DE MI SIN QUE A MI ME AFECTE LE PERTENECE A EL.
Ejemplo. Cuando conocemos a
alguien e inmediatamente creemos que es perfecto para nosotros, atribuyéndole
características como que es por ejemplo detallista, cariñoso, con
capacidad para escuchar y generoso. Sin embargo, en el primer momento en el que
veamos un comportamiento egoísta, tu mismo te decepcionaras porque la imagen
mental que te habías construido mediante la idealización no encaja con lo que
estas experimentando.
CUARTA LEY DEL ESPEJO:
TODO LO QUE ME GUSTA DEL OTRO, LO QUE
AMO EN EL, TAMBIEN ESTA DENTRO DE MI, RECONOZCO MIS CUALIDADES EN OTROS.
EJERCICIO SOBRE LA LEY DEL ESPEJO
- Es bueno que hacer una lista con todas las
cosas que nos molestan de las personas que nos rodean.
- También hacer una lista sobre aquello que
tenemos que agradecer a esas personas que siempre nos incomodan
(probablemente algo habrá hecho por nosotros o por alguien a quien
apreciamos).
- Si queremos superar esto y dar lo mejor de
nosotros para sanar por ejemplo del dolor, rabia, tristeza, entonces el
contacto debe ser directo, es decir, expresarle a la persona las cosas que
sentimos y disculparnos. Sin embargo, si no lo contemplamos como opción,
una forma menos radical es escribir una carta que no enviaremos, de tal
forma que esto nos permita liberar el desencuentro emocional que
albergamos en nuestra alma.
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